¿Te permites sentir? ¿Te permites sentir esas emociones? ¿Las bonitas y las no tan bonitas? Estos últimos días me he dado el permiso de sentir todo en su máxima potencia.
Muchas veces nos preguntan ¿Cómo estás? Y la respuesta más común es: bien gracias, ¿y tú?, o quizás conozcas a una de esas personas que su respuesta siempre es: cansado, ¿y tú? Ahora cuando me hacen esa pregunta estoy intentando tomarme unos segundos antes de responder de manera automática y realmente decir cómo me siento.
¿Qué diferencia hace? Sobre todo porque puede que estés pensando que no a todo mundo le quieres contar lo que te pasa, y es obvio! Pero creo que tiene un gran poder el decir como te sientes, porque al decirlo realmente estás aceptándolo. Hay que mostrarnos cómo somos y no fingir que todo está bien. Somos humanos y es normal que no todos los días estés bien, y por otro lado ojo que no es normal que todos los días estés cansado, aunque el cansancio no es una emoción, al final si lo dices todos los días, lo vuelves una cuestión mental y no física. Presta atención a como te sientes y no te quedes sólo ahí, haz algo al respecto.
Si me conoces, sabes que me encanta hacer yoga y que llevo años practicándola, me encanta por que es un momento de reconexión conmigo donde estoy presente en mi cuerpo y con todos mis sentidos bien alerta gracias a mantener la atención en la respiración. No se si has escuchado que hay ciertas posturas que te ayudan a liberar emociones que se quedan estancadas en el cuerpo, bueno pues yo lo viví hace poco. Era un día que me levanté ya un poco emocional, pero tratando de no pensar mucho en eso decidí salirme de la casa e irme a yoga que sinceramente es como mi escape para muchas cosas.
Llegué a la clase con una de mis maestras favoritas, y como normalmente lo hace empieza la clase con el mantra Om, pero esta vez fue diferente porque lo hizo durar por varios minutos, mientras estábamos cantando el mantra con los ojos cerrados, empecé a sentir como se llenaban mis ojos de lágrimas y literalmente empecé a llorar! Al principio me dio pena y traté de reprimirlo, pero realmente nadie me estaba viendo, y entonces me relajé y dejé que todas esas emociones vinieran al primer plano para sentirlas y dejar que fluyeran por mi cuerpo, y se sintió tan bien.
Bueno volviendo al punto… te recomiendo que te des permiso de SENTIR.
Si estás feliz, siente que efecto tiene esto en tu cuerpo, ¿te da un subidón de energía?, ¿te la pasas cantando?, ¿sonríes todo el tiempo?, ¿eres super productivo?
Si estás triste, siente donde lo sientes en tu cuerpo, ¿no tienes ganas de salir?, ¿comes cualquier cosa?, ¿solo quieres dormir?, ¿te vas al gym 3 hrs para distraerte?, ¿te ves una serie completa en 2 días?
Si estás preocupado, ¿no puedes dormir bien?, ¿sientes que llevas todo el día en el trabajo pero no haz hecho nada?, ¿te haces mil historias en la cabeza que luego no sabes ni como llegaste a este escenario?
Si estás emocional, analiza que efecto tiene esto sobre tu cuerpo, ¿empiezas a llorar por cualquier cosa?, ¿te sales todo el día para no pensar?, ¿evitas hablar sobre el tema que te causó estar así?, ¿no te sientes motivado para comer o hacer ejercicio?
Si estás cansado, ¿es cansancio físico o mental?, ¿sales del trabajo y te vas directo a hacer ejercicio 2 hrs y luego andas de aquí para allá haciendo pendientes todo el día?, tal vez deberías de bajar un poquito las revoluciones en tu día a día y darte tiempo para no hacer nada, que en realidad no hacer nada ya es en sí cuidarte a ti mismo, o claro que también puede ser que necesites checarte y ver si no traes algún desbalance en temas de salud.
Está claro que cada persona vive las emociones de manera diferente, pero lo importante es que no intentes evadirlas. Siéntelas y observa que efecto tienen sobre ti, y cualquiera que sea éste dales ese espacio que necesitan. Si, me refiero a que les des espacio a estás emociones porque si están ahí es por algo, no se trata de “adoptarlas” como parte de tu estilo de vida, y reprimirlas tampoco te va a servir de nada, incluso puede ser peor. Esto obviamente va mas para las emociones negativas, porque precisamente estás son las que tenemos que dejar que circulen por nuestro cuerpo para que salgan de él.
Las emociones positivas compártelas, contagia a otros con tu alegría y tu energía; pero las emociones negativas, no la reprimas ni trates de pretender que no están ahí, simplemente las estarás bloqueando y muchas veces sale peor porque esas emociones van cargadas con energía negativa que se queda estancada en alguna parte de tu cuerpo y a veces pueden pasar días o hasta años, hasta que vuelve a salir a la superficie y quizás luego ya ni te acuerdas de donde viene, y entonces hay que hacer aun más trabajo para sanar ese trauma y liberar la energía estancada.
Por eso, es mejor aceptar las emociones, las buenas y las malas. Permítete sentir y reflexiona sobre ellas, verás como empiezas un camino de auto descubrimiento tan lindo que te va a ayudar a conectar más contigo mismo y ese proceso de aceptación interno es super poderoso. Sentir te reconecta con tu intuición para saber tomar mejores decisiones y saber que acción es la correcta a tomar.
El día de hoy date permiso de SENTIR, siéntate en un lugar en silencio por 5 o 10 minutos y haz un escaneo de tu cuerpo y de tus emociones. Déjate SENTIR, yo te recomiendo que mientras haces el escaneo estés muy consciente de tu respiración, ésta te va a ayudar a dejar que las emociones fluyan por tu cuerpo y las que tengan que salir, ¡déjalas salir!
Es un proceso que toma tiempo pero mientras le des el espacio, todo irá fluyendo y pronto pasará a ser cosa del pasado. Las emociones son pasajeras, no las hagas tuyas.